CIUDAD DE MÉXICO.- Según un estudio realizado a 23 adultos sanos, el sueño afecta regiones del cerebro donde se realiza la elección de alimentos. La falta de sueño altera entonces significativamente el lóbulo frontal, el cual controla el comportamiento y la toma de decisiones.Stephanie Greer, estudiante graduado en el laboratorio de la Universidad de Berkeley, detalló que las imágenes por resonancia magnética muestran cómo la pérdida de sueño afecta directamente la capacidad de elegir los alimentos adecuados.Así que cuando te dé hambre a media tarde, quizá lo que necesitas no son esas galletas, sino descansar un poco o un buen sueño.