ESPECIAL.- En medio de la gran pena que padecen familiares y amigos de Hiromi Hayakawa y su hija Julieta Santana, se despidieron de ellas con una emotiva misa, en la que estuvieron las cenizas de ambas, enmarcadas por una foto de la joven cantante. La misa se llevó a cabo en las instalaciones de la Parroquia de Todos los Santos, ubicada en el Territorio Santos Modelo. La pequeña iglesia lució llena. Al frente sus seres más queridos, cerca de sus corazones, como estuvieron siempre, acompañándose juntos en este trance.La misa contó con la participación del coro Emaús de la Parroquia de Cristo Rey. jeem